Las alitas adobadas las suelo preparar los findes, cuando no me apetece cocinar y preparo cosas sencillas y rápidas, es lo que denomino #diaguarrete .
Es una de esas comidas rápidas y sabrosas que les encantan a los peques. De hecho, es una de las cenas preferidas de mi Mar, y se las preparo junto con las patatas cajún.
Me encanta ver como disfrutan con algo tan sencillo como unas alitas de pollo maceradas con especias y unas patatas al horno, toman “comida rápida” pero casera. Todo esto, y una buena peli se convierten en el plan perfecto para una noche del próximo fin de semana.
Ingredientes:
- Medio kilo de alitas de pollo.
- Media cayena.
- 1 cucharadita de orégano.
- Media cucharadita de pimentón de la Vera picante.
- Media cucharadita de pimentón de la Vera dulce.
- 2 ajos troceados.
- Una cucharadita de azúcar moreno.
- Media cucharadita de tomillo.
- Media cucharadita de romero.
- Sal.
- 200 ml. de vino blanco.
- Aceite de oliva virgen extra.
Preparación:
Debemos poner en adobo las alitas unas 10 horas antes. Para ello, salaremos las alitas y las colocaremos en un bol o en una fuente.
En otro bol, mezclaremos las especias, la cayena, los ajos, el azúcar moreno y el vino blanco y removeremos hasta que hayamos mezclado bien.
Verteremos el adobo sobre las alitas, taparemos el bol con film transparente y conservaremos en la nevera hasta que las vayamos a cocinar.
Freiremos en abundante aceite y a disfrutarlas!