Hace unas semanas salió a la venta en Lidl la tradicional heladera de verano. El año pasado no me la compré porque pensaba que no la iba a usar casi. Este año, cuando vi nuevamente la oferta tampoco me decidí y no la compré el día del lanzamiento.

Empecé a ver por Instagram que casi todo el mundo se la había comprado, empezaron a desfilar por las galerías de Instagram helados de fresa, de chocolate, de vainilla… y me arrepentí de no habérmela comprado. Transcurridos 3 ó 4 días, me acerqué a Lidl a comprar otras cosas y vi que todavía quedaban un par de heladeras,  no me lo pensé… la cogí  y me fuí a la caja. Ya era mía!!!

Os tengo que confesar que estoy tremendamente contenta con el artilugio. Ahora siempre tengo en el congelador un par de litros de helado casero. Es muy fácil usarla y el helado que puedes preparar en ella no tiene nada que ver con el que puedas comprar.

En casa también están muy contentos con la heladera. La chiquitina de la familia, Laia, está enamorada del helado al que hoy os voy a invitar. En cuanto abro el congelador me dice “oreo, oreo…”

Hoy os invito a probar un rico y refrescante Helado de Oreo.

Ingredientes:

• 700 ml de nata de montar.
• 200 gr. de azúcar.
• 2 cucharadas de azúcar invertido.
• 1 paquete de galletas Oreo.
• 50 gr. de leche desnatada en polvo.
• Mini Oreo para decorar.

Preparación:

El recipiente de la heladera donde se va a formar el helado deberá estar en el congelador un mínimo de 24 horas.

Comenzaremos poniendo al fuego un cazo con 200 ml de nata, 100 gr de azúcar y la leche en polvo. Lo mantendremos a fuego lento unos 10 minutos sin dejar que hierva. Removeremos con la ayuda de unas varillas para evitar que se formen grumos. Enfriaremos y reservaremos.

Montaremos el resto de la nata con 100 gr de azúcar y añadiremos a la mezcla anterior que ya estará fría. Incorporaremos 2 cucharadas de azúcar invertido y  mezclaremos. Añadiremos las galletas Oreo a trozos pequeños. Repartiremos con las varillas los trozos de las galletas por toda la mezcla y enfriaremos en el frigorífico durante 4 horas.

Conectaremos la heladera, encajaremos el recipiente que estaba en el congelador y la pondremos en marcha. Verteremos poco a poco la mezcla por el bocal de la heladera y la dejaremos trabajar unos 40 minutos. Transcurrido este tiempo ya tenemos el helado de Oreo listo para degustar o, si nos gusta que tenga una textura más congelada, para introducir en el congelador.