Siempre intento tener en casa algo para desayunar: bizcochos, pan, galletas… Hace unos cuantos días, me disponía a preparar magdalenas para el desayuno y mis ojos tropezaron con unas manzanas que había asado por la mañana. Pensé en incluir una de ellas en mis magdalenas y cambiar un poco la textura y el sabor.
Tengo varias tartas de manzana publicadas, (no os perdáis mi Tarta de manzana, el Hojaldre de manzana y crema pastelera, el Hojaldre de manzanas y requesón, ni mi Tarta de manzana con mermelada) pero nunca me había decidido a introducirla en las magdalenas y tengo que confesaros que el resultado me encantó. Les añadí un toque de cardamomo y quedaron geniales.
Os animo a que las probéis, tienen un toque diferente!
Ingredientes:
- 4 huevos.
- 270 gr. de azúcar.
- 1 manzana asada.
- 100 ml. de leche entera.
- 10 gr. de levadura química.
- 320 gr. de harina.
- 250 gr. de aceite de girasol.
- 2 cucharaditas pequeñas de cardamomo.
- 1cucharadita pequeña de canela.
- Una pizca de sal.
Preparación:
Precalentaremos el horno a 200º. Comenzaremos blanqueando los huevos con el azúcar. Agregaremos la leche, el aceite, la manzana asada y chafada con un tenedor, y batiremos con la ayuda de las varillas. Batiremos muy bien para que cojan aire. Incorporaremos el cardamomo y la canela.
Tamizaremos la harina, la sal y la levadura y agregaremos a la mezcla, batiendo sólo hasta mezclar.
Taparemos con film transparente y guardaremos en el frigorífico por lo menos 1 hora, aunque puede estar toda la noche. Yo prefiero esperar toda la noche y a la mañana siguiente las horneo.
Rellenaremos las cápsulas de las magdalenas hasta las 3/4 partes y espolvorearemos con azúcar. Antes de meter las magdalenas, bajaremos la temperatura del horno a 180º y las colocaremos en la segunda rendija del horno empezando por abajo.
Con esta cantidad, a mi me salen normalmente 19 piezas.
Cuando introduzcáis un palillo y salga limpio, estarán listas!